sábado, 24 de junio de 2017

El Cerro Vueltas

    El Cerro Vueltas que podríamos decir es parte del Macizo de la Muerte corresponde al sector  noroccidental de las principales cumbres distrito de Copey, cantón de Dota. Su altitud es de 3120 msnm, a pesar de no alcanzar la altura del Buena Vista, Sákira o Frío posee el más hermoso páramo del sistema en el que se encuentra inmerso.

Gira al Vueltas, Una historia, Un camino

Bofedal Vueltas
   Al finales del siglo XIX Don Pedro Calderón inicia la construcción de la primer trocha que comunicaría al Sur del país desde el Valle Central, sería por el actual valle de los Santos donde inicia la colonización que  da origen al cantón de Pérez Zeledón. Salimos un sábado a conocer el hermoso páramo de Las Vueltas, un día antes había comprado un libro sobre el muy reconocido y fundador del Museo Nacional de Costa Rica Henry Pittier el cual cruzó estos caminos hace ya más de 100 años.
   Pese que su acceso no es tan complejo está cerrado al público, como amante de montaña tengo que decir que agradezco dicha resolución ya que semejante obra de la naturaleza es sumamente sensible al impacto que el turismo podría causarle. La gran cantidad de especies de plantas y su páramo conservado nos recordó aquellos "jardines" del Cuericí, las turberas del Vueltas cuentan con un gran bofedal rodeado de cañuela o matamba típica de los páramos de la Muerte en donde una helada lluvia nos acompañó.



   Después tuvimos charla en la gran y rústica casa de la familia Seelye, en la cual preguntamos la historia del conservacionista Ruddy Seelye, ya fallecido y su esposa e hijas de origen estadounidense las cuales nos atendieron amablemente con un café y unos deliciosos biscuits. Entre neblina y llovizna ya tarde, regresamos a la pequeña pero acogedora cabaña que alquilamos.
El frío comienza a hacer de las suyas y un fogón nos mantenía calientes mientras yo comencé a leer las historia de Pittier a su paso en esta tierra, nuestro amigo anfitrión y escalador "Koki" nos tocaba una canción con su guitarra, su joven amigo parecía intentar mantener el calor y mi amigo Javier se tomaba en serio el asunto de la comida.
  No puede faltar las historias de miedo en este ambiente y pues sale a flote la historia del Guardián, que no se puede entender si no antes saber que sobre el Vueltas pasaba ese camino antiguo ahora absolutamente abandonado entre el denso bosque. Una vieja casa de refugio existió donde moró por muchos años la familia Seelye, desafortunadamente ya hoy no existe a causa de un incendio. Los Seelye abandonaron el refugio, pero muchos siguieron quedándose allí en donde se dice que el "alma" o el fantasma de un hombre quien caminaba todas las noches hasta tocar la puerta y luego desparecía, quizás un alma en pena por no alcanzar con vida el refugio, al que llaman El Guardián.


Vaya que los pioneros de estos caminos eran hombres y mujeres valientes que lograron soportar el intenso frío, la lluvia y la densa selva que se encuentran en estas tierras, al final Henry Pittier tampoco la vio fácil con sus caballo cansados y el quebrado paisaje del cual aun faltas bastantes kilómetros para llegar al Buena Vista.


Lo que queda del refugio Vueltas

Vegetación del páramo y bosque montano









Antiguo camino, trocha Calderón

Aquí existió el Refugio




Cañuela o Matamba (Chusquea)

Hiperycum Irazuence

Helecho Blechnum



Puya

Helecho plagyogiria

líquen

Pluma de Indio (Elaphoglossum)

Bromelia


Helecho polysticum

Robledales


Hiperzia